*Su pliego de demandas incluye la abrogación de la ley de la USICAMM, aumento salarial y una reforma al sistema de pensiones.

POR Baltazar SÁNCHEZ HUERTA / Redacción

LÁZARO CÁRDENAS, MICH.- Con la toma de la Unidad de Servicios Regionales y Supervisiones de la Secretaría de Educación del Estado, la expresión magisterial Poder de Base Región Costa en Lázaro Cárdenas inició esta mañana un programa de acción centrado en el paro de labores por 72 horas, expresó el Profesor Juan Manuel Cano, de la Coordinación Regional de Lázaro Cárdenas.

Leonel Ochoa Molina, Secretario General de la Coordinación SNTE-CNTE Poder de Base, apuntó que hasta el día de hoy no hay mesa de resolución por lo tanto el paro de 72 horas continúa con los foros de análisis sobre las afectaciones de la mal llamada reforma educativa neoliberal de 2012, los foros de pedagogía se realizarán en la escuela primaria federal Francisco J. Mujica ubicada en la col pie de casa.

Con la consigna de “el paro es culpa del Estado”, el pliego de demandas incluye la abrogación de la ley de la USICAMM, aumento salarial y una reforma al sistema de pensiones en este martes 20, se prevé la toma de la SEE, mañana miércoles continuaría la movilización con la realización presuntamente de “foros regionales pedagógicos” y el jueves 22 se efectuarían “marchas regionales, mítines políticos y ruedas de prensa.”

Desde inicios del mes, Poder de Base anunció sus movilizaciones y de las mismas, parece que hay menos presión de su parte para demandar plazas para egresados normalistas, que sí incluía en sus demandas iniciales.

De acuerdo con la SEE, que ha rehusado dialogar sobre las demandas de Poder de Base, no hay pendiente alguno en materia salarial con los docentes. El mismo presidente Andrés Manuel López Obrador, en su visita a Morelia la semana pasada, destacó que el estado es el único en el país que recibe un trato extraordinario de la federación para el pago de maestros.

Sobre el impacto de las medidas que anuncia Poder de Base, las mismas se han reducido derivado de la división que padece la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que se ha fragmentado en alrededor de ocho corrientes; Poder de Base ha sufrido dos escisiones en su estructura, tras acusaciones a sus liderazgos de corrupción y privilegiar intereses de grupo.