*La extinción de la vaquita marina está a la vuelta de la esquina y cada vez hay menos vaquitas en el mar, reconoce Ecología Municipal Lázaro Cárdenas.

POR Baltazar SÁNCHEZ HUERTA / Redacción

  LÁZARO CÁRDENAS, MICH.- Como la vaquita, muchas especies están en la misma situación: un final que cada vez es más cercano y cruel. Las razones pueden variar, puede ser por el tráfico ilegal, como el caso de las especies marinas, pero también por la contaminación de agua, aire y tierra que producen las grandes empresas contaminadoras. Así lo dio a conocer el Jefe de Ecología Municipal, Ingeniero Aarón Campos Alvarado.

  El funcionario municipal habló sobre la vaquita marina, una rara especie marina, donde más habita es en el alto golfo de California, en México, está al borde de desaparecer y su población se ha reducido en un 98,6% en la última década, según un estudios e información sobre esta especia marina de no terminar con la pesca ilegal, los científicos advierten que su extinción podría ser inminente.

  Se están haciendo ingentes esfuerzos para salvar a esta especie. Pero cada año que pasa queda menos que proteger. A este ritmo quizá el Día Internacional de la Vaquita Marina 2023 sea una conmemoración póstuma. Porque ya no quedará ni una en el Golfo de California. Y la culpa será, como casi siempre, de los seres humanos.

  Destacó que los estudios genéticos han demostrado que la vaquita marina es una población naturalmente pequeña. También es la única especie de mamífero marino endémica de México. Debido a que hay tan pocos ejemplares, esta pequeña especie de marsopa era desconocida a nivel científico hasta la segunda mitad del siglo pasado.

  La principal amenaza para la vaquita es quedar atrapada accidentalmente en las redes de pesca. En esta zona se emplean especialmente redes de enmalle para pescar tiburones, rayas y camarones. Y de forma ilegal se persigue a la totoaba. Este es un enorme pez al que se captura por su vejiga natatoria. Por la que en China se pagan sumas fabulosas. Allí se cree que da buena suerte. Por esa causa la totoaba también está en peligro de extinción.

  Los estudios estiman que cada año mueren en estas redes más especímenes de los que nacen. El censo de 1997 ya indicaba una población alarmantemente pequeña compuesta por apenas 8 mil 600 individuos. En 2007 había perecido el 70 por ciento. Y a día de hoy los cálculos más optimistas hablan de apenas 10 ejemplares.

  México ha prohibido la pesca del totoaba y ha hecho ilegal la pesca con redes de enmalle en los lugares donde viven las vaquitas, pero la práctica continúa sin cesar. En 2021, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del Gobierno de México informó que definió nuevos indicadores «para la verificación, vigilancia y supervisión de la pesca en el norte del golfo de California.