*La facilidad de operación y cambios en el estilo de vida dan auge al comercio callejero
POR Baltazar SÁNCHEZ HUERTA
LÁZARO CÁRDENAS, MICH.- Por cada mercado municipal existen casi dos tianguis en este puerto de Lázaro Cárdenas, los primeros suman 7; los segundos 16. Los comerciantes y clientes prefieren los tianguis porque en éstos “la oferta económica es más atractiva”, indicó un ex funcionario de Panteones y mercados del Ayuntamiento, “Los mercados ya no son tan rentables como antes. Éstos se crearon en función de un estilo de vida del puerto de hace más de 50 años”.
En ese sentido se ha llevado a cabo un despoblamiento (de mercados) porque el estilo de vida ha cambiado dijo Sergio Gallo Valdovinos, el Mercado Cuauhtémoc, en el fundo legal, fue el primero en su tipo y se construyó en 1958. Desde ese año los mercados han estado regulados. En cambio, los tianguis empezaron a ser normados a partir de 1995, con la creación de la unidad municipal que los supervisa.
El ex funcionario enfatizó que el comerciante busca los medios para poder subsistir: “El tianguis, a diferencia del mercado, cumple una función que le permite movilidad al comerciante. Una vez que se vaya consolidando, buscará otras formas de acceder a otro tipo de comercio en criterios formales. Vemos el ejemplo de corredores comerciales como son el Mercado Sobre Ruedas, que son tianguis ya consolidados”.
Mencionó que en número de unidades económicas hay alrededor de 490 puestos en los tianguis de Lázaro Cárdenas y sus Tenencias, lo que representa que más de 20 mil personas, como mínimo, viven de este tipo de economía informal. Mientras que en mercados hay menos de 600 locales, aunque no reveló cifra de personas beneficiadas.
Oferta y demanda
La potencia tanto de mercados y tianguis es porque se identifican como unidades económicas trascendentes para la ciudad, aunque aceptó: “El tianguis no existiría si no hubiera demanda para él. Nuestra misma sociedad genera la demanda para los tianguis”. Explicó que “las parejas de hoy en día tienen un ritmo de vida muy distinto a las de antes, dependen mucho de su tiempo. Por el tema de movilidad salen muy temprano a trabajar y llevan a cabo este tipo de actividades (las compras) en función de la disponibilidad que se tiene, es cuando aprovechan los tianguis”.
CRÓNICA “Agarras más clientela”
Tener un local establecido con la mercancía almacenada y horario fijo no es atractivo para David Yáñez. Él heredó la “profesión” de “tianguista” de su madre, quien inició el negocio hace más 30 años en los llamados mercados ambulantes de la entidad Mercado Sobre Ruedas ambos tienen un colorido puesto de ropa de mujer que instalan y desinstalan a diario en el tianguis que les toque, según el día y el Lugar recorriendo parte del estado, Uruapan, Lombardía, Nueva Italia, Apatzíngan, Arteaga y Lázaro Cárdenas.
No les molesta, ya se acostumbraron. “Ya es tradición, a nosotros se nos hace más cómodo. Nos da más oportunidad de agarrar más clientela en diferentes lugares que en uno solo”. Trabajan seis días de la semana en el mismo tianguis, pero independientemente del rumbo en que les toque establecerse a vender, hay que madrugar para estar instalándose a las seis de la mañana. “Lo tomamos como algo natural, ya no nos pesa”, dice David.
Si ellos y otros tianguistas optaran por mudarse a uno de mil locales libres que existen en los 91 mercados de Michoacán, posiblemente desaparecería buena parte de los tianguis de la ciudad, pero “encerrarse en un mercado” no es una opción para estos comerciantes que prefieren seguir itinerantes.
“Un hermano sí tuvo una tienda y sí le iba bien, pero sí me tocó ir varias veces y sí me enfadaba. Aquí (en el tianguis) es de rápido: a las seis de la tarde ya estás desocupado, tienes parte del día libre”, justifica el vendedor.
Es viernes y se instala en el tianguis “Sobre Ruedas”, sobre la calle Vicente Guerrero y avenida Heroica Escuela Naval Militar a un costado del mercado Hidalgo. Es el día malo para los locatarios de allí, con todo y que se ubican en el Centro de la ciudad y suele ser muy concurrido. Pero los viernes, con el tianguis afuera, los pasillos están libres e irónicamente, la calle está apretada con los comercios errantes.
“Siempre dicen que ya se va a acabar el tianguis pero no, crecen más. En las dos tenencias más grandes, Las Guacamayas y La Mira ya hay tianguis todos los fines de semana y hay hasta nocturnos, empiezan a las cinco o seis de la tarde y hasta las 09 a 10 de la noche. Cada vez hay más gente, hay más tianguis, así es este ‘bisnes’”, cierra el comerciante con una carcajada.